A 100 AÑOS DE LA MARAVILLOSA TEORÍA DE LA 

RELATIVIDAD GENERAL DE ALBERT EINSTEIN 

Crédito: ESO

Hace cien años, Albert Einstein publicó su teoría de la relatividad general, uno de los avances científicos 
más importantes del último siglo.

Un resultado clave de la teoría de Einstein es que la materia deforma el espacio-tiempo, y es por ello 
los objetos masivos pueden causar curvaturas observables en la luz de objetos lejanos. El primer 
éxito de la teoría fue la observación, durante un eclipse de Sol, de la luz de una lejana estrella desviada
 cuando pasaba cerca del Sol, en una cantidad calculada previamente por la teoría.

Desde entonces los astrónomos han encontrado muchos ejemplos de este fenómeno, conocido como 
"lente gravitacional". Más allá de una ilusión cósmica, las lentes gravitacionales permiten a los
 astrónomos una forma de estudiar galaxias y cúmulos de galaxias muy lejanos de una forma que
 de otro modo sería imposible incluso con el más potente de los telescopios.

Los últimos resultados de un grupo de galaxias conocido como “Cheshire Cat” muestra como
 la teoría de cien años de antigüedad de Einstein puede seguir aportando nuevos descubrimientos hoy en día. 
Los astrónomos han llamado así a este grupo por su parecido con la cara de un gato sonriendo. 
Algunas de las galaxias muestran una apariencia alargada y curvada debido a la gran cantidad de masa,
la mayor parte en forma de materia oscura únicamente detectable mediante su efecto gravitacional.

Más específicamente, la masa que distorsiona la luz galáctica más lejana está distribuida rodeando las 
dos gigantes galaxias que serían los "ojos" y la "nariz". Los múltiples arcos que dan la forma circular
 a la "cara" surgen de la deformación de la luz de cuatro diferentes galaxias de fondo, al igual que ocurre 
con las que forman los "ojos". Las galaxias individuales del sistema, a la vez que los arcos formados
 por la lente gravitacional, han sido observadas en luz visible por el Telescopio Espacial Hubble de la NASA.

Cada galaxia que forma cada "ojo" es el miembro más brillante de su propio grupo de galaxias 
y estos dos grupos están moviéndose cada uno a más de 400.000 kilómetros por hora. Los datos del 
observatorio de rayos-X Chandra de la NASA (en púrpura) muestran el gas caliente que ha estado
 calentándose a millones de grados, y que es la evidencia de que los grupos de galaxias se están uniendo.
 Los datos en rayos-X de Chandra también muestran que el "ojo" izquierdo del grupo presenta una
 alimentación activa del agujero negro supermasivo del centro de la galaxia.

Los astrónomos piensan que el grupo se convertirá en lo que se conoce como grupo fósil, definido
 como una acumulación de galaxias que contienen una galaxia gigante elíptica y otras mucho menores
 y débiles. Los grupos fósiles pueden representar una etapa temporal por la que casi todos los grupos de
 galaxias podrían pasar en algún momento de su evolución. Por este motivo los astrónomos desean 
comprender mejor las propiedades y comportamiento de estos grupos.

El grupo representa la primera oportunidad para los astrónomos de estudiar un progenitor de un grupo
 fósil. Los astrónomos estiman que los dos "ojos" se juntarán dentro de mil millones de años, dejando
 una gran galaxia y docenas de otras menores en un grupo combinado. En ese momento ya se habrá 
convertido en un grupo fósil.

Un nuevo paper sobre el grupo fue recientemente publicado en The Astrophysical Journal y está 
disponible online. Los autores son Jimmy Irwin (University of Alabama), Renato Dupke 
(National Observatory of Brazil), Rodrigo Carrasco (Gemini Observatory), 
Peter Maksym (Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics), 
Lucas Johnson y Raymond White III (Alabama).


Comentarios

Entradas populares de este blog